
PICARDIA - Zamba
y les diré al principiarla, aunque es triste hacerlo así,
a mi madre la perdí antes de saber llorarla.
Me quedé en el desamparo, y al hombre que me dio el ser
no lo pude conocer; ansí, pues, dende chiquito,
volé como un pajarito en busca de qué comer.
O por causa del servicio que a tanta gente destierra;
o por causa de la guerra que es causa bastante seria,
los hijos de la miseria son muchos en esta tierra.
Ansí, por ella empujado no sé las cosas que haría,
y aunque con vergüenza mía, debo hacer esta alvertencia:
siendo mi madre Inocencia, me llamaban Picardía.
Me llevó a su lado un hombre para cuidar las ovejas;
pero todo el día eran quejas y guascazos a lo loco,
y no me daba tampoco siquiera unas jergas viejas.
José Hernández– Cuti Carabajal