
Romance de la pena negra
La piqueta de los gallos Cavan buscando la aurora
Cuando por el monte oscuro baja soledad Montoya
Cobre amarillo su carne huele a caballo y a sombra
Yunques ahumados sus pechos gimen canciones redondas
Soledad por quien preguntas sin compañía y a estas horas
Pregunte por quien pregunte dime a ti que se te importa
Vengo a buscar lo que busco mi alegría y mi persona
Soledad de mis pesares caballo que se desboca
Al fin encuentra la mar y se lo tragan las olas
No me recuerdes el mar que la pena negra brota
En las tierras de aceituna bajo el rumor de las hojas
Soledad que pena tienes que pena tan lastimosa
Llora zumo de limón agrio de espera y de boca
Que pena tan grande corro mi casa como una loca
Mis dos trenzas por el suelo de la cocina a la alcoba
Que pena me estoy poniendo de azabache carne y ropa
¡Ay mis camisas de hilo! ¡Ay mis muslos de amapola!
Soledad lava tu cuerpo con agua de las alondras
Y deja tu corazón en paz soledad Montoya.
Federico García Lorca – Cuti Carabajal